Distingamos al
crappie
Por Antonino
Rodríguez
El Rascacio, Año VII, Número 1,
enero 1987.
En el acto de proclamación de récord nacional de pesca
deportiva, en el mes de marzo del pasado año de 1984, correspondiente a las
capturas de peces presentadas durante el año 1983 y en la edición del periódico
Tribuna (de La Habana) coincidente con aquella fecha, se divulgó como cosa poco
común la presentación de un ejemplar de crappie para optar por récord,
capturado por quien esto escribe en la modalidad de pesca de vara y carrete,
significándose en aquella oportunidad que este pez es de una especie casi
desconocida en nuestro país.
Teniendo en cuenta la curiosidad e interés que mantienen
nuestros pescadores deportivos, especialmente nuestra juventud, en conocer más
detalles de los rasgos característicos más sobresalientes que facilitan la
identificación de esta sub-familia de peces, hemos considerado oportuno
divulgar una reseña histórica y deseminativa de esta especie en nuestro
país que, aunque aparentemente es poco conocida, prácticamente o lo es porque
conocemos de su existencia en diferentes masas de aguas fluviales en nuestro
territorio.
NOMBRE COMÚN: CRAPPIE
NOMBRE CIENTÍFICO: POMOXIS ANNULARIS
Este pez, cuyo nombre común es crappie, también es conocido
en otras regiones o países con el nombre de botón de oro, perca fresa,
crappie blanco, boca papel, nueva luz, y
en Cuba con los nombres de bocú, biajaca mexicana, longorongo, etc. Es muy
parecido al sun fish (pez sol) pero alcanza mayor tamaño, pudiendo pasar de las
dos libras en condiciones favorables. Es insectívoro muy voraz, por lo que
consecuetemente su boca está más desarrollada; su aleta dorsal y las pectorales
también más desarrolladas que las del pez sol; es más prolífero, su desove
contiene de 3 000 a 10 000 huevecillos, tiene una mancha negra en el ángulo
anterior de cada opérculo semejante al pez sol. En igualdad de peso con
relación al pez sol, el crappie es de mayor longitud pero de menor diámetro en
la parte más ancha de su circunferencia. Es una especie de extraordinaria
adaptabilidad, pudiendo vivir perfectamente en cualquier charca de agua y su
resistencia es tal que hemos comprobado que puede permanecer fuera del agua más
de veinticunco minutos sin que manifieste afectación distinguible. Su coloración,
como otros animales, está regida por el mimetismo.
La mejor identificación se podrá obtener en la abundante y
bien organizada exposición de peces taxidermiados (sic) que mantiene de forma
permanente la Federación Cubana de Pesca Deportiva provincial en la calle Neptuno
esquina a Espada, en esta ciudad de La Habana.
Esta especie procedente de Norte América fue introducida en
Cuba a finales del año 1927 y principios de 1928 conjuntamente con el Black
Bass (boca grande y boca chica) conocida en nuestro país como Trucha, el cat
fish (pez gato), el sun fish (pez sol), el el warmouth bass y el rock bass,
aclimatándose y reproduciéndose primeramente en unos estanques que en aquella
época existieron en la escuela forestal Conde de Pozos Dulces de la Secretaría
de Agricultura y posteriormente e el sitio denominado Ciénaga donde también se
logró la primera introducción de la carpa gris (carpa criolla).
En el año 1928, una vez lograda una abundante reproducción
se trasladaron lotes de dichas especies para la repoblación de los ríos más
importantes de las vertientes Norte y Sur de nuestro territorio y por
emigración también fueron poblados los arroyos y canales afluentes de dichos
cursos de agua. También se le entregaron lotes de alevines a todas aquellas
personas que tuvieron interés en repoblar arroyos o lagunas dentro de sus
predios.
Después del triunfo de la Revolución en el año 1959 nuestro
Gobierno Revolucionario con extraordinaria visión emprendió el vasto plan
agropecuario iniciando la construcción de presas, micropresas y canales en
todas aquellas áreas o zonas de nuestros ríos y arroyos que topográfica y
geológicamente reunieran condiciones adecuadas para dicho fin y es así que hoy
nuestra Isla se encuentra prácticamente sellada de tan indispensables recursos
hidráulicos que en algunos casos ya están siendo multi-utilizados y que por
generación espontánea han facilitado una extraordinaria diseminación de las
especies de peces tan codiciadas por nuestros pescadores deportivos que así
cuentan en todas las provincias con lugares adecuados para la realización de
todas las actividades de pesca deportiva fluvial incluyendo las competencias
calendariadas desde nivel de base hasta las COMPETENCIAS INTERNACIONALES.
De las especies mencionadas introducidas en nuestro país a
finales de la década del año 1920 contamos con abundantes antecedentes de su
existencia en todas las provincias solamente del Black Bass boca grande
(trucha), el sun fish (pez sol), el crappie (biajaca mexicana), sin embargo
debemos significar que el Cat fish (gato) solamente se han capturado algunos
ejemplares en el río Saramaguacán de la vertiente norte de la provincia de
Camaguey y en el dique formado por la extracción de la cantería con que fue
construido nuestro Capitolio Nacional , cuya cantera se encuentra en el barrio
Capellanías del municipio de Artemisa, provincia de La Habana.
Ningún antecedente tenemos de la existencia en nuestro país
del black bass (boca chica), del warmouth bass ni del rock bass, aunque no
dudamos que en futuras proclamaciones de récords sea premiado algún compañero
pescador por haber presentado una trucha boca
chica, un pez gato, un rock bass u otra especie aunque no se encuentre
comprendida en la nueva relación de peces bajada por la Federación Cubana de
Pesca deportiva nacional, para optar por records.
La pesca de esta especie con vara y carrete (spinning
extra-ligero, sedal de 3 libras de resistencia, cucharillas giratorias de 15
mm, cucharillas ondulantes de 15 mm, larvas de libélulas propeladas (sic) de 18
mm, calandracas vivas u otros señuelos oscilantes que produzcan movimientos por
la recuperación del sedal, proporcionan profunda emoción al pescador, porque la
picada no se hace esperar.
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